Cómo cambiar de hipoteca variable a fija

Si tienes una hipotcea variable y ahora estás sufriendo la subida del Euribor, no te desesperes porque existen varias opciones para cambiar de hipoteca variable a fija.

Las opciones son tres: Subrogación, novación o pedir un nuevo préstamo.

Subrogación de hipoteca

Supone cambiar el préstamo de banco, buscar otra entidad financiera que quiera asumir la hipoteca, siempre mejorando las condiciones actuales.

El nuevo banco tendrá que asumir los gastos de apertura, notaría, registro y gestoría. Mientras que el hipotecado tendrá que asumir los gastos de tasación.

Novación de hipoteca

Otra de las soluciones, para cambiar de hipoteca variable a fija, es llegar a un acuerdo con tu banco para renegociar las condiciones y pasar de tener una hipoteca fija a variable.

Coge cita con un agente de tu entidad bancaria y negocia con tu banco. Eso sí, tendrás que volver a tasar tu vivienda para que el banco sea consciente del riesgo de la operación y finalmente, formalizar la novación ante notario.

En este tipo de operación se podrán ver afectados los tipos de interés, plazos de pago, capitales y bonificaciones.

Contratación de un préstamo nuevo

Para realizar esta operación deberás liquidar tu hipoteca actual, con ese nuevo préstamo hipotecario. Podrás pasar de tu hipoteca variable a fija, pero no te librarás de pagar ciertos gastos que en su día ya asumiste, como notaría y la cancelación registral.

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